Aspectos sicológicos de la cirugía plástica

La cirugía estética es solicitada cuando una persona localiza en su propio cuerpo algo que no corresponde a lo que desea como su ideal imagen corporal y entonces recurre al cirujano plástico. Sin embargo, la cuestión fundamental no se concentra sólo en la reconstrucción de la imagen física, es la auto-imagen, “el retrato” de uno mismo lo que da el sello de la individualidad y del comportamiento, lo que establece las fronteras de las realizaciones personales. Por lo tanto, aquellos que buscan la cirugía plástica frecuentemente requieren algo más que la propia cirugía y es lo que se define como la reafirmación de la autoestima.

¿CUÁNDO ES EL MOMENTO DE REALIZAR UNA CIRUGÍA ESTÉTICA?

De acuerdo con la OMS “salud” es sinónimo de bienestar emocional, social y físico. Cuando la persona está insatisfecha con su imagen al punto de querer cambiarla, consulta al cirujano especialista. El momento oportuno para realizar ese cambio es cuando esa persona que ha sido bien informada demuestra seguridad en aquello que está haciendo, sin ansiedad excesiva o depresión.
Para el cirujano es necesario captar con certeza que la insatisfacción de ese paciente está basada en una visión coherente de su apariencia. No debe tratarse de una queja puramente emocional, con una visión distorsionada de sí mismo, o perseguir un fin distinto a través de un cambio físico con el propósito de conseguir objetivos que no dependen en la realidad de este cambiode apariencia o de forma.

Es fundamental abordar el lado psicológico, ya que se trata de un cambio permanente del cuerpo, con un gran poder sobre la autoestima.

EL TEMOR NATURAL FRENTE A UNA INTERVENCIÓN QUIRÚRGICA

Frente a la posibilidad de realizar este cambio, habitualmente el miedo y la ansiedad son esperables. Es por eso que la información correcta y detallada por parte del cirujano, y crear un vínculo que le dé seguridad y confianza al paciente, permitirán que se mantenga un equilibrio psicológico, dominando esta ansiedad y miedo.

LAS EXPECTATIVAS

En cirugía estética no es posible asegurar resultados.

Se debe trabajar sobre una expectativa realista y alcanzable, que dependerá de factores propios del cirujano y de su técnica, de los del propio paciente tanto anatómicos, fisiológicos y genéticos, ajenos a la voluntad del médico y de los cuidados del post operatorio, fortaleciendo la idea de que es un proceso evolutivo hacia un resultado final en que el tiempo va en beneficio del paciente.

Por ende, la debida relación de confianza con su cirujano hará que esta espera sea apacible y sin ansiedadexcesiva. Muchas veces ante la inquietud, la palabra tranquilizadora y la actitud de serenidad de parte de él, devolverán al paciente la necesaria calma en la evolución de su cirugía.

LA TOMA DE CONCIENCIA RESPONSABLE

En el pre-operatorio se debe hacer una evaluación completa y se establecen ciertos plazos que deben ser asumidos como lógicos de cada cirugía y su evolución.

El paciente debe ser informado de sus propias responsabilidades y aceptar el compromiso de respetar las indicaciones, los controles y todas las medidas necesarias que pueden ser tomadas para el éxito. Una buena historia clínica, exámenes pre-operatorios, suspensión de medicamentos, del cigarrillo y el pase operatorio en caso necesario, para operar al paciente sano, física y mentalmente y bajo condiciones de un apoyo clínico eficaz.

RESPECTO A COSTOS

Cada médico tiene su manera de componer los costos de una cirugía. Los valores del cirujano principal, del segundo cirujano, del anestesista y de la arsenalera son variables según la envergadura y tiempo operatorio.

El paciente debe procurar un cirujano plástico especialista, buscando calidad y acreditación profesional dentro de valores razonables, pero con seguridad, no dejándose influenciar por el precio. Muchas veces lo más barato es a costas de sacrificar las medidas de seguridad, estando en juego su propio cuerpo, su vida.

Para un cirujano especialista, la excelencia del resultado es su objetivo. Los honorarios poco tienen que ver con los resultados, esta búsqueda del éxito es independiente de lo que se recibe, es la satisfacción del paciente reflejada en su expresión y su semblante al finalizar el proceso, el éxito logrado y esto trasciende.

Lógicamente hay gastos involucrados que será necesario cubrir en base a la cirugía y sus características, lo cual será definido previamente. Una de las indicaciones para no operar a un paciente es aquella en que hace cuestión a los valores y escatima buscando insistentemente reducirlos. En estos casos, en el post operatorio, habitualmente este perfil psicológico demuestra que esa persona estará siempre disconforme con el resultado, aún siendo óptimo, ya que reclamará que lo cancelado fue excesivo y su resultado debía haber sido superior.

Dr. Llamil Kauak.
Cirujano Plástico.
Clínica Las Condes.